Tomillo

 Nombre común del:

Thymus vulgaris.

Originario de los países que rodean el mar Mediterráneo.

Arbusto bajo de tallos leñosos y hojas pequeñas, que alcanza una altura promedio de 0.50 m. Posee múltiples hojas y pequeñas flores que van del blanco al rosa, muy aromáticas. Plinio en épocas remotas, lo menciona como un remedio eficaz en el tratamiento de mordeduras de serpiente. En herbolaria se recomienda para malestares del pecho que produzcan flema y tos. En la cocina Italiana  se utiliza con frecuencia por sus propiedades que estimulan la buena digestión.

Etimológicamente proviene de la raíz griega (Thimós - fuerza vital, brío, coraje). Encontramos que su nombre hace referencia a la glándula Timo. Se trata de una pequeña glándula del tamaño de una nuez que se encuentra a la mitad  del pecho, a la cual se le relaciona directamente con la producción de linfocitos y por lo tanto de mantener el equilibrio inmunológico del organismo.

(Linfocito: célula Linfática que tiene su origen en la medula ósea, y pasa a formar parte del sistema linfático instalándose preferentemente en el timo, los ganglios y el vaso. De donde se distribuye por el organismo a través del corriente sanguíneo).

Aceite Esencial de Tomillo.

Inhalado o aplicado sobre la piel con algún aceite portador o pomada, se recomienda para fortalecer el sistema nervioso y activar la conexión de las células cerebrales, proporcionando el ambiente necesario para la concentración mental y el ejercicio de la memoria. Lo cual nos ayuda a disipar el agotamiento y los estados depresivos. Eliminando síntomas como: somnolencia, indiferencia y retraimiento. 

Por su buena relación con la glándula Timo, es un auxiliar indispensable para el fortalecimiento del sistema inmunológico.

Del manual Modulo II del Diplomado en Aromaterapia Clínica. Editado por el Instituto Mexicano de Aromaterapia S.C.